Hacia una revolución de la lectura

Surge un nuevo proyecto en la vida del libro, una revolución de la lectura ante la inminente apocalípsis del libro y lo que conlleva la lectura virtual. La escuela y los medios de comunicación deben jugar un papel fundamental para preservar, conservar y reforzar valores centenarios que contribuyen a la mejor formación del individuo mediante los libros. 

Todos sabemos la importancia que ha tenido, y tiene la popularización de Internet. Hoy en día todo se hace a través de la red. Buscamos información, contribuimos a aumentarla, incluso desarrollamos nuestra vida social a través de Internet. Estos pueden ser los principales privilegios que poseemos gracias a la vida moderna. Gracias a la popularización de la cual comentaba han cambiado muchas cosas en la sociedad, tales como la comunicación, un elemento tan importanto como la vida misma. Y no sólo ha cambiado la comunicación en el ámbito literario, sino también dentro de ese aspecto incluimos la comunicación entre los propios individuos. Aquella que se hace "cara a cara".


A medida que las tecnologías avanzan, la sociedad consigue obtener de éstas una serie de comodidades, que sólo sirven para hacer la vida individual más cómoda, pero, ¿Y si por obtener esa comodidad tuvieramos que rechazar a las costumbres, valores, y métodos de realizar las cosas tradicionales?. Con esto hago incapié en el hecho de que si seguimos avanzando tecnológicamente, nos adaptamos a esa tecnología que supone el nuevo mundo moderno y con ese avance dejamos atrás lo antiguo, en el caso de la literatura los libros en papel, la comunicación entre las personas no a través de una red, no sólo perderemos su valor material, podremos llegar a perder también muchos valores morales. Podemos llegar a infravalorar cualquier cosa que no pertenezca a ese mundo moderno. Parece una tontería, pero hay que darse cuenta de que Internet no lo es todo, que hay un mundo fuera de las redes que es mucho más interesante y tiene mejores cosas que descubrir que ese. Hay que saber llevar mundo "antiguo" con mundo "moderno" de manera equitativa.


En mi opinión creo que no hay nada como tocar un libro, olerlo, sentir sus páginas y al fin, poder disfrutar leyéndolo. Considero ésto como una de las mejores experiencias que ofrecen la vida, que en su momento fue un avance pero que hoy en día se está convirtiendo en un método atrasado.

Ana Macías Delgado