viernes, 23 de mayo de 2014

El director del departamento de Anatomía y Embriología Humana II de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), José Ramón Mérida, ha aceptado "la propuesta de dimisión de su cargo" que se le ha trasladado desde el rectorado de la universidad después de la polémica suscitada por la acumulación de cadáveres donados en sus instalaciones, destapada por EL MUNDO este lunes. Esta es la noticia.


Me parece desastroso el trato que se le ha dado a estos cadáveres. Cuando la única intención de los familiares que han contribuido con los cuerpos a la ciencia ha sido por la ciencia pura y se han privado de un entierro o una merecida despedida a lo que fueron personas, como forma de agradecimiento, el hombre en cuestión, que ha sido merecidamente despedido, los ha tratado como si detrás no guardasen una historia. La historia que como mínimo todos los seres humanos, más buenos o más malos guardamos por haber sido parte de este mundo. 


Por eso, por muy muy atea que sea la manera de pensar del responsable, no me parece un argumento para nada válido, el hecho de que eso ya solo eran cadáveres, que es el argumento que podría haber dado para defender su puesto. Y ya no es solo el hecho de tratar mal a personas, con nombre y apellidos, aunque fallecidas, es el hecho de que desde que uno entra en un puesto de trabajo o en un una sociedad en concreto, aprende o debe aprender que hay que respetar los materiales que usan el resto de compañeros y aunque no los usasen, una actitud destructiva nunca es válida porque la investigación solo tiene un fin constructivo. Así me parece muy merecido el despido, repito, y más oportuna me hubiera parecido una dimisión. 



Alberto Raillo

0 comentarios:

Publicar un comentario

Con la tecnología de Blogger.