Ayer leí esta
noticia en el periódico y me llamó la atención. La Dirección General de la Policía va a adquirir un camión equipado para lanzar chorros de agua con los que disolver manifestaciones, argumentando que su objetivo es “proteger el libre ejercicio de derechos y libertades y garantizar la seguridad ciudadana” y que se trata de “disponer de medios materiales que, debido a la actual dinámica social y en caso de tener que restablecer el orden público, se pueda realizar de la forma menos lesiva posible”, calificando a este camión como "menos lesivo que las pelotas de goma". También es chocante el precio de este camión, más aún con los tiempos que corren. Su precio ronda los 400.000 €, y más el IVA el precio alcanza el medio millón de euros.
Parece mentira, que en vez de invertir el dinero en medidas eficaces, el gobierno y el Ministerio del Interior lo hagan en instrumentos como este camión, con el fin de disolver manifestaciones y protestas, impidiendo a los ciudadanos expresar su descontento y luchar por sus derechos. A esto ha de ser sumado la nueva ley que el gobierno ha establecido recientemente, conocida como
"Ley Anti15M".
Además de hacer mal su trabajo, de hacer que el paro siga siendo extremadamente alto, de ser unos corruptos y de causarnos vergüenza ajena; además de todo eso, se gastan nuestro dinero en comprar camiones para evitar que la gente exprese su opinión, y hacen leyes, que según ellos, son "para mantener el orden público", pero no tienen otro objetivo que no sea el de quitarnos más dinero y tratar de que ninguna manifestación ni protesta moleste a nuestros fantásticos políticos.
Habrá gente que quiera mirar para otro lado, que niegue rotundamente lo que voy a decir o que me tachen de loco, pero este país, poco a poco, se va pareciendo cada vez más a la dictadura franquista.
Jesús Fernández Domínguez 2ºA
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